Política

Empresarios y la CGT acordaron trabajar en una agenda común para la pospandemia

Sin el Estado presente, mientras el presidente Alberto Fernández participaba de un encuentro organizado por el Consejo de las Américas (COAS), la Asociación Empresaria Argentina (AEA) y la CGT -los principales referentes del sector privado- acordaron habilitar una mesa de seguimiento de la situación económica en medio del impacto de la pandemia, y trabajar en la discusión sobre las trabas para fomentar las exportaciones y la generación de empleo formal en el marco de la preocupación por la recesión, la inflación y la pobreza.

Los hombres de negocios y los sindicatos debatieron vía Zoom acerca del contexto actual para intentar hallar consensos sobre las medidas que requerirán trabajadores y empresas para salir de la debacle económica que dejará la pandemia y las iniciativas tomadas para contener el virus. En la reunión, según contaron fuentes que participaron a LA NACION, se habló sobre la presión impositiva y la falta de productividad de la economía, pero también de la necesidad de crear empleos de calidad en tiempos en los que crece la informalidad.

Tanto desde el sindicalismo como desde el empresariado se volvió a recalcar la necesidad de llegar a un acuerdo con los acreedores privados de la deuda y evitar el default, y se remarcó el rol que debe jugar el sector privado en la pospandemia.

Mientras crece la preocupación por el agravamiento de la crisis económica, la mesa chica de la CGT -que integran Carlos Acuña, Héctor Daer, Andrés Rodríguez, José Luis Lingeri, Gerardo Martínez y Antonio Caló- y los empresarios coincidieron en la necesidad de avanzar en una serie de propuestas para elevar al gobierno nacional, entre las que se destacan “la necesidad de reducir gradualmente la presión tributaria sobre el sector formal de la economía” y la promoción de políticas para fomentar el empleo.

En un comunicado conjunto, desde la central obrera y los empresarios, también resaltaron el papel “clave de las empresas privadas y sus cadenas de valor en el proceso de desarrollo y particularmente para la salida de esta crisis”.

Aunque no hubo representantes del gobierno nacional, este fue el primer paso, según dijeron, para “avanzar en la formulación de consensos básicos, que den lugar en el tiempo a la implementación de políticas específicas”.

Por el lado empresario, participaron Jaime Campos, presidente de AEA; Luis Pagani (Arcor); Paolo Rocca (Organización Techint); Héctor Magnetto (Grupo Clarín); Sebastián Bagó (Laboratorios Bagó); Carlos Miguens (Grupo Miguens); José Cartellone (José Cartellone Construcciones Civiles); Cristiano Rattazzi (FCA Argentina); Federico Braun (La Anónima); Alberto Grimoldi (Grimoldi); Enrique Cristofani (Santander); Eduardo Elsztain (IRSA); Marcelo Argüelles (Sidus); Alberto Hojman (BGH); Jorge Aufiero (Medicus); Norberto Morita (Southern Cross Group); David Lacroze (Grupo Lacroze); Jorge Ferioli (San Jorge Emprendimientos); Marcos Galperin (Mercado Libre); Alejandro Bulgheroni (Pan American Energy Group); María Luisa Macchiavello (Droguería del Sud); Luis Perez Companc (Grupo Perez Companc).

Ni Rocca ni Magnetto ni Pagani tomaron la palabra (tres de los empresarios más importantes del país) en el encuentro. Sólo escucharon, según contaron a este medio. “Fue una reunión muy buena, muy agradable”, señaló un empresario que estuvo presente. “Acordamos que todos tendremos que hacer un esfuerzo pasa salir de la pandemia”, agregó. El empresario contó que se acordó darle seguimiento a este primer contacto con una mesa cada quince días.

“La idea era presentarse. Generar un vínculo para sostener este encuentro espontáneo entre dos sectores privados”, contaron en una importante empresa industrial.

Luego de la polémica abierta entre el Presidente y Cristina Kirchner por los empresarios invitados oficialmente al acto del 9 de Julio, el Gobierno no envió a ningún representante a la reunión entre empresarios y sindicalistas. El Ejecutivo tampoco avanzó, pese a haberlo prometido en incontables oportunidades, en la creación de un Consejo Económico y Social.

El encuentro vuelve a marcar un hito en el debate que el Gobierno no logra saldar de cara al futuro: ¿qué rol jugarán el sector privado y el Estado en la reconstrucción pospandemia? La Cepal calculó la semana pasada que la caída del PBI en el país este año superará el 10%. Los analistas privados estiman que el producto puede ver un derrumbe de hasta 15%.

El Gobierno ya definió mantener los programas de ayuda a las empresas afectadas por la pandemia. El programa de Emergencia de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), todavía no se conoce en qué modalidad, se mantendrá para los salarios de julio a pagar en agosto, aunque el Ejecutivo espera sumar más créditos blandos.