Lavagna advirtió sobre la dificultad de bajar la inflación. Hay un “efecto arrastre de la altísima inflación de 2019” y el dólar está “atrasado”, dijo.
Según publicó el diario Clarín, Marco Lavagna, próximo titular del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, anticipó que en 2020 habrá una inflación del 40%, debido a un “efecto arrastre” producto de la alta cifra de 2019. Además, opinó que el dólar actual, a 62 pesos, está “atrasado”.
“La inflación de 2019 es tan alta que hagas lo que hagas no vas a tener menos de 25 o 30 puntos de base el año que viene. Después depende del tipo de cambio y del proceso de reestructuración de la deuda, que no va a ser menor, pero va a estar cercano al 40%”, explicó en declaraciones a radio La Red. “Esperemos que sea menos”, remató.
Además, el economista aseguró que el dólar “está atrasado” porque “hubo tres meses con inflación de más de 4 puntos, y eso genera nuevas presiones”. El martes, según el promedio del Banco Central, la divisa cerró a $ 62,87.
“Si lo tomas hoy, $ 63 puede servir. El problema es la inflación: si dejo un tipo de cambio de $ 60 y una inflación de 4% por mes, a los 3 meses el tipo de cambio queda retrasado. La clave es cómo haces para que se muevan juntos. Lo que va a terminar pasando es que siempre los precios se van a ajustar al tipo de cambio más alto”, siguió el futuro titular del Indec.
Lavagna, que es diputado nacional y su mandato termina el 10 de diciembre, afirmó que su designación no tiene que ver con acercar a su padre, el exministro de economía y excandidato presidencial Roberto Lavagna, al espacio del Frente de Todos.
“Alberto Fernández quería tener a cargo del Indec alguien que no sea de su espacio político. Un instituto que debe ser técnico, profesional, jerarquizado e independiente. Nosotros queremos ir para otro lado que el que fue Macri”, explicó.
Lavagna rescató el trabajo del macrismo al frente del organismo de estadísticas y censos, que durante el kirchnerismo estuvo fuertemente intervenido. “Todo el mundo cree en la inflación que mide el Indec y eso no es menor”, dijo.
Además, anticipó que le gustaría medir la pobreza de otra manera, “multidimensional”. “Sería muy positivo, pero a veces es más fácil decirlo que hacerlo. Me encantaría que tengamos mapas del hambre y otras cuestiones en las que tenemos que avanzar”, cerró.
