Consultores locales alertaron que el mercado laboral formal asalariado tiene igual tamaño que cinco años antes.
Desde el fin de las restricciones sanitarias hasta hoy, el empleo ha sido uno de los factores más dinámicos de la economía argentina y una comparación estadística con el resto de los países de la región demuestra que el ritmo de creación de nuevos puestos de trabajo ha sido ampliamente superior a la media. Ahora bien, cuando se mira “puertas adentro” y se analiza la calidad del empleo creado, se encuentra que una gran parte del nuevo mercado laboral se desarrolló en la informalidad.
Según un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la región en forma conjunta logró un repunte de los niveles de empleo en el último año y la mayoría de los países recuperaron el terreno perdido durante la irrupción del Covid-19, aunque hay algunas excepciones.
El punto negativo, es que la productividad laboral promedio de la región experimentó una caída en 2022, destacándose la contracción en sectores como la industria, la construcción y el comercio.
Por su parte, los salarios medios reales se estancaron en 2022, lo que contrasta con el aumento observado en 2021 y refleja el impacto de la mayor inflación, principalmente en Argentina y Venezuela. Además, como se mencionó anteriormente, en nuestro país la informalidad ganó protagonismo en los últimos años.
Cuatro años de recuperación
La pandemia de Covid-19 afectó con fuerza a las economías y los mercados laborales de la región, que experimentaron en 2020 una contracción sin precedentes tanto de su actividad económica como de la participación y la ocupación laboral, que afectó sobre todo a los sectores económicos y a los grupos de trabajadores más vulnerables.
La Cepal destaca que la implementación de políticas económicas y sociolaborales posibilitaron la progresiva recuperación de las actividades, lo que condujo a la normalización de los principales indicadores del mercado laboral, aunque inicialmente con rezagos en los colectivos más vulnerables.
A partir de las estadísticas oficiales de cada país, el organismo detectó que la Argentina fue el segundo país con mayor nivel de recuperación de la tasa de ocupación entre 2019 y 2022, con un repunte de 4,7 puntos porcentuales. Solo fue superada por Bolivia, que logró una mejora en su tasa de empleo del 7,5 por ciento.
Los resultados toman como base el nivel de empleo que tenía cada país en 2019, independientemente de si se trataba de una tasa relativamente alta o baja para su economía.
Como muestra el gráfico, la evolución de la tasa de ocupación regional muestra que en 2022, como promedio ponderado, el indicador recuperó exactamente el nivel anterior a la pandemia (2019), pero cuando se analiza su desempeño a nivel de los países se observa que la recuperación es aún incompleta en un grupo de países.
Comenta la Cepal que siete países habían superado a fin de 2022 la tasa de ocupación que registraban en 2019, con Bolivia y la Argentina en los lugares más destacados, mientras que cinco países estaban a menos de 1,2 puntos porcentuales de recuperar el nivel prepandemia. En cambio, ocho países mostraban rezagos mayores, entre los que se destacaban Belice y Panamá.