La Justicia confirmó que la mujer que desapareció en Berazategui hace 10 días nunca estuvo embarazada.
La policía la sigue buscando, pero no logran localizarla desde el 29 de enero, cuando salió de su casa y jamás regresó. Les dijo a sus hijas y a su mamá, una jubilada que la busca con desesperación, que tenía que comprar algunas cosas en la farmacia para después internarse en el hospital Evita Pueblo para dar a luz.
Sobre el operativo de búsqueda, contó que están analizando las cámaras de monitoreo municipales y detrás del rastreo de la SUBE, que la habrían localizado viajando desde el Pato hacia la Ciudad de Buenos Aires. “Tenemos que seguir chequeando las cámaras”, afirmó el funcionario.
Además, reveló que en las próximas horas podrá acceder a la recopilación de datos que se extrajeron del celular de Cuevas. “Veremos qué información podemos sacar de ahí para saber dónde está”, dijo Ichazo.
Es que el celular fue entregado por la mamá de Yésica tras su desaparición, ya que la mujer lo había dejado en su casa antes de ir supuestamente a la farmacia del barrio. Para abrir el dispositivo, se usó el sistema UFED (Universal Forensic Extraction Device).
Lo mismo hicieron con el teléfono de la pareja de Cuevas, Eduardo Javier Balmaceda, para determinar si es sospechoso o cómplice de la desaparición, aunque desde la fiscalía no encontraron pruebas para imputarlo.
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Balmaceda siempre pensó que ella esperaba trillizos, pero al declarar ante la Justicia explicó que la mujer nunca dejó que él ni nadie la acompañaran a hacerse los estudios. “Me decía que esperara en la vereda”, aseguró. Ellos estaban en pareja a pesar de las idas y vueltas en la relación, y el fiscal también confirmó que la mujer había denunciado a su novio por violencia de género.
“Al celular de la pareja le extrajimos chats y geolocalización. Ahora lo estamos chequeando todo, pero -aparentemente- no habría nada. Cuando le pedimos el teléfono lo entregó sin reparos”, aseguró Ichazo.
