Racing goleó por 4-1 a Athlético Paranaense en el Cilindro por la vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores con los goles de Agustín Almendra, Adrián Martínez, Roger Martínez, Gastón Martirena, había descontado transitoriamente Maycon, y se clasificó a las semifinales luego de 27 años.
Con la obligación de vencer para seguir en carrera, el equipo de Gustavo Costas volvió a dar el golpe sobre la mesa ante un rival más que complejo y sostiene su puja por cumplir el gran anhelo académico por volver a ser campeón en el plano internacional, después de 36 años de su última vuelta olímpica y justamente en un recordado a equipo que contaba con su actual entrenador como capitán. La historia no podría haber iniciado de mejor manera, ya que Almendra adelantó al dueño de casa a solo 18 segundos de distancia del pitazo inicial, con un furibundo disparo desde afuera del área que marcó el tono de lo que sería la velada.
Menos de 15 minutos más tarde volvió a decir presente Maravilla Martínez, que se consolida como goleador del torneo, y Roger transformó el triunfo en goleada con tan solo 30 minutos en el reloj de juego, lo que permitió brindar mayor tranquilidad de cara a la segunda etapa.
Si bien Nikão descontó al minuto del complemento y volvió a dejar a tiro al equipo de Lucho González (que asumió pocos días atrás), la Academia se hizo muy fuerte y volvió a transformar la victoria en goleada con el golazo de Martirena que terminó por liquidar las acciones. Victoria de manera abultada más que merecida y que permite seguir soñando con saldar la gran cuenta pendiente que mantiene el club en ese plano.
Con este resultado, el conjunto de Avellaneda vuelve a las semifinales de un torneo internacional por primera vez desde la Copa Libertadores 1997 y ya sabe que en dicha instancia se enfrentará al Corinthians de Ramón Díaz y Memphis Depay. En la otra parte del cuadro, el pasaje a la final del próximo 23 de noviembre en Asunción se dirimirá entre Lanús y Cruzeiro.
